¿Agnostiqué?

Cuando Bertrand Russell fue encarcelado por oponerse a la entrada de Inglaterra en la Primera Guerra Mundial, el alcaide de la prisión le preguntó cuál era su religión (una pregunta rutinaria por aquel entonces en todos los ingresos). Russell le respondió que era agnóstico. El alcaide, como no conocía la palabra, tuvo que pedirle que la deletreara; después, suspiró y dijo:

Bueno, hay muchas religiones distintas, pero supongo que todos adoramos al mismo Dios.

Russell cuenta en su autobiografía que aquel comentario le mantuvo animado durante semanas.

(Escuché esta anécdota en la conferencia de Fernando Savater de la que os hablaba ayer. Al parecer, la cuenta Martín Gardner en ¿Tenían ombligo Adán y Eva?)

Citas célebres de clérigos humoristas (4)

El futuro de la humanidad depende de la familia cristiana.

Lema de la pancarta que lució en la misa por la Sagrada Familia celebrada hoy, en Madrid. Colabora en el evento el Movimiento por la Extinción Voluntaria de la Humanidad.

«El Catecismo de la Iglesia es partidario […] de evitar toda marca de injusta discriminación contra las personas homosexuales». Pero «con una declaración de valor política», se «pedirá a los Estados y a los organismos internacionales de control de los derechos humanos que añadan nuevas categorías [de personas] protegidas, sin tener en cuenta que, al adoptarlas, crearán nuevas discriminaciones«.

Celestino Migliore, arzobispo representante de la Santa Sede ante las Naciones Unidas en Yo no soy homófobo pero es que a mí los maricones

No creo que haya ninguna mujer a la que le guste abortar, así que lo que hay que hacer es ayudarla a que no lo haga en vez de facilitarle el hecho del aborto.

Antonio María Rouco Varela, cardenal arzobispo de Madrid y presidente de la Conferencia Episcopal Española en Así lo que hay que hacer es repartir bien de condones.

Todo está permitido en el mundo de hoy, excepto proclamar a Dios […]. Nos sentimos injustamente tratados.

Alfredo Dagnino, propogandista católico, en Queremos todavía más pasta.

No esperamos un trato de favor, sino que se aplique la ley en equidad […]. La escuela católica sufre una «clara discriminación» frente a la pública.

Manuel de Castro, secretario general de la organización Escuelas Católicas, en Esperamos un trato de favor. Y queremos todavía más pasta.

La masturbación femenina es más arriesgada que la masturbación masculina […]. A veces la mujer se mete los dedos, o incluso objetos que pueden ser peligrosos. Especialmente dado que el himen es tan sensible, y jugar con él podría rasgarlo […]. De esta forma, la mujer queda expuesta ante acusaciones de fornicación […]. Algunos cercanos podrían incluso matarla […]. Obviamente, ese crimen está prohibido y sería un grave pecado. Incluso si ha fornicado, una mujer no merece ser asesinada. Como mucho, debería ser azotada.

Yousuf Al-Qaradhaiw, Sheik sunnita, hablando en un vídeo sobre la masturbación femenina. A esto no soy capaz de darle una perspectiva humorística, ni siquiera puedo imaginar cómo se masturbarán las mujeres en su país para romperse el himen, así que así se queda.

Solución: ¡vende el ordenador!

¿?¿?¿?

(Vía: caduca HOY)

Y mucho menos católico

Si Jesucristo estuviese aquí ahora, hay una cosa que no sería: cristiano.

(Mark Twain, humorista y escritor estadounidense)

Contra la publicidad infantil

ninotv
En estas fechas tan señaladas, la televisión se va convirtiendo en ese mundo psicodélico de droga y felicidad con el que soñaría cualquier Teletubbie: los perfumes encharcan las aceras, las burbujas del champán bailotean envueltas en un extraño condón, crecen bombones en las bocas sonrientes, nieva hasta en el Sáhara y todo exhala purpurina o ristras de espumillón. Así que, para no volvernos locos, colocamos el filtro: es Navidad. Asumimos que los creativos se pinchan Prozac por estas fechas (más de lo habitual, vaya) y cambiamos de canal para esquivar sus desatinos siempre que podemos. Lo que me asusta es comprobar que gran parte de esos desatinos van dirigidos a un colectivo que quizás no sea tan hábil para filtrarlos: los niños.

Si la publicidad es manipulación dirigida a los adultos, qué pasa cuando es un niño el que la mama, sin saber para qué sirve, hasta qué punto es una falsedad, sin disponer de un filtro que le permita discernir y catalogar adecuadamente toda esa información. Me preocupan todas esas mañanas muertas ante la tele, las cartas interminables a los Reyes Magos, las cocinitas, los bebés que cagan para las niñas y los supermilitares mortíferos para los niños… Me preocupa que también ellos se conviertan finalmente en consumidores a través de las carteras de sus complacientes y agotados padres. ¿Qué esperanza de cambio cabe cuando esta es la educación que permitimos?

No te preguntes qué tierra dejarás a tus hijos, pregúntate qué hijos dejarás a tu tierra.