El futuro de la humanidad depende de la familia cristiana.
Lema de la pancarta que lució en la misa por la Sagrada Familia celebrada hoy, en Madrid. Colabora en el evento el Movimiento por la Extinción Voluntaria de la Humanidad.
«El Catecismo de la Iglesia es partidario […] de evitar toda marca de injusta discriminación contra las personas homosexuales». Pero «con una declaración de valor política», se «pedirá a los Estados y a los organismos internacionales de control de los derechos humanos que añadan nuevas categorías [de personas] protegidas, sin tener en cuenta que, al adoptarlas, crearán nuevas discriminaciones«.
Celestino Migliore, arzobispo representante de la Santa Sede ante las Naciones Unidas en Yo no soy homófobo pero es que a mí los maricones…
No creo que haya ninguna mujer a la que le guste abortar, así que lo que hay que hacer es ayudarla a que no lo haga en vez de facilitarle el hecho del aborto.
Antonio María Rouco Varela, cardenal arzobispo de Madrid y presidente de la Conferencia Episcopal Española en Así lo que hay que hacer es repartir bien de condones.
Todo está permitido en el mundo de hoy, excepto proclamar a Dios […]. Nos sentimos injustamente tratados.
Alfredo Dagnino, propogandista católico, en Queremos todavía más pasta.
No esperamos un trato de favor, sino que se aplique la ley en equidad […]. La escuela católica sufre una «clara discriminación» frente a la pública.
Manuel de Castro, secretario general de la organización Escuelas Católicas, en Esperamos un trato de favor. Y queremos todavía más pasta.
La masturbación femenina es más arriesgada que la masturbación masculina […]. A veces la mujer se mete los dedos, o incluso objetos que pueden ser peligrosos. Especialmente dado que el himen es tan sensible, y jugar con él podría rasgarlo […]. De esta forma, la mujer queda expuesta ante acusaciones de fornicación […]. Algunos cercanos podrían incluso matarla […]. Obviamente, ese crimen está prohibido y sería un grave pecado. Incluso si ha fornicado, una mujer no merece ser asesinada. Como mucho, debería ser azotada.
Yousuf Al-Qaradhaiw, Sheik sunnita, hablando en un vídeo sobre la masturbación femenina. A esto no soy capaz de darle una perspectiva humorística, ni siquiera puedo imaginar cómo se masturbarán las mujeres en su país para romperse el himen, así que así se queda.
jajajaja Cojonudos, Almudena, como siempre :mrgreen: Por lo de los propagandistas católicos, yo no sé qué sustancia alucinógena toman para pervertir la realidad… Sus razonamientos equivalen siempre a «Como tú estás enfermo, es justo que yo vaya al médico».
Y el comentario al último me ha encantado: se prestaría a una entrada tipo «Usos y costumbres de la mujer árabe en el uso de plátanos y otras formas fálicas» :P
Yo nunca había oído hablar de los propagandistas hasta ver esa noticia, pero manda huevos, desde luego… ¿tienen algo que ver con el opus o algo así?
Y bueno, sobre la masturbación femenina… en fin, qué decir: El clítoris, ese gran desconocido. En cualquier caso, me quedo con tu sugerencia para la próxima vez que tenga que ponerle título a algo parecido.
Madre, yo confieso estar enganchado a la sección de «Clérigos Humoristas»…Pido y acepto una penitencia justa por ello…
Últimamente me pregunto aún con más fuerza si es la política quien tiñe a la religión, o viceversa; y también porqué han llegado a ser tan grandes(en seguidores) religiones que tratan al sexo de la manera que lo hacen (empiezo a dudar también de si mis principios humano-animales son ciertos o quizá yo estoy equivocado y «ellos» tienen razón)
Ya, es una cuestión interesante la que planteas. No lo había pensado así.
Sí he leído alguna cosilla que podría tener relación. Dicen que en un origen el cristianismo predicaba la monogamia para poner freno a las enfermedades de transmisión sexual que campaban por el Imperio Romano. No sé si será cierto. Pero esto no explica por qué el islam también condena la sexualidad o por qué ambos rechazan la masturbación. Por otra parte, dicen que el sexo era el chantaje que podía utilizar una mujer económicamente dependiente, a cambio de su manutención de por vida. La moralidad instituyó este intercambio, dictaminando un matrimonio «para siempre» y la virginidad de las mujeres hasta el matrimonio. En el islam por ejemplo, los hombres sólo pueden casarse con tantas mujeres como puedan mantener. Parece que guarda cierta relación.
Por otra parte, cabría preguntarse hasta qué punto la culpa y el miedo son armas poderosas para mantener sometida a la gente. Si estigmatizas comer caracoles pocos acudirán a tu confesionario. Pero atacar algo tan primario, tan inevitable, tan íntimo como el sexo, te garantiza individuos reprimidos y con un profundo sentimiento de culpabilidad que probablemente quieran purgar. Estoy pensando sobre todo en los adolescentes que empiezan a descubrir el sexo, evidentemente a alguien adulto con una sexualidad sanamente desarrollada, no le puedes convencer de que se sienta mal por ello. En cambio a un crío (y sobre todo a una cría, pienso) que todavía no conoce su cuerpo, que posiblemente no se sienta muy seguro de sí mismo, ni de aquello que desea o no hacer, que ni siquiera está muy seguro de cómo quiere relacionarse con los demás, con su pareja o sus ligues de turno… Todas las dudas y sentimientos relacionados con algo que desea tanto y que le provoca tanta turbación, pueden canalizarse hacia la culpa, el rechazo, la inseguridad, la autodestrucción. Una vez sembrada la semilla en el adolescente, tienes un adulto sometido y traumatizado con toda probabilidad, que se masturba con asco y acude de inmediato al confesionario, (acortaría el proceso que se masturbarse en el confesionario, pero más vale no dar ideas…).