Sí, amiguitos: vengo a romper una lanza por el texto justificado en la web —algunos ya estaréis afilando vuestros cuchillos jamoneros; pues guardadlos hasta el final del post, no os vayáis a pinchar…— con este artículo a modo de extensión de mi último comentario en el blog de Ocularis, que acaba de ser rediseñado (el blog, no él). Como decía en dicho comentario, la aversión, casi convertida en moda, que se ha propagado por Internet hacia el texto justificado me parece una soplapollez muy snob (sin acritud… ;-) ). Me vais a disculpar por ser tan brusco, pero los que claman contra el texto justificado también lo hacen en términos tajantes como si estuvieran en posesión de la verdad absoluta.
A mí me gusta el texto justificado. Sí. Qué pasa. El texto justificado mola. Creo que da un aspecto más ordenado, más profesional, más pulcro. También opino que quien diga que el texto alineado a la izquierda es lo correcto, está equivocado; de la misma manera, quien diga que el texto justificado es lo correcto, está equivocado. Para mí es una cuestión de gustos.
Los detractores suelen esgrimir como arma arrojadiza los «ríos de blanco» que pueden producirse por el hecho de que el navegador simplemente añade espacios en blanco (más grandes o más pequeños, según convenga) para conseguir el justificado. Esto hace que aparezcan grandes zonas en blanco entre palabra y palabra, o peor, concatenadas de línea en línea que dificultan la lectura y ofrecen un aspecto horrible.
Si no digo que no. Pero, ¿no será que la columna usada es muy estrecha? Una columna de texto cuyas líneas tienen mucho menos de 80 carácteres de media tiene un problema: o es estrecha, o la letra es grande. Siguiendo la sencilla regla (mía, empírica) de los (alrededor de) 80 carácteres por línea no sólo se facilita la lectura (no hay que cambiar con tantísima frecuencia de línea con la vista), sino que además milagrosamente desaparece casi por completo el problema de los «ríos de blanco» (a no ser que pongas en una misma frase «esternocleidomastoideo» un porrón de veces…). Ahora que cada uno haga un poquito de autocrítica y reflexione, no vaya a ser que las columnas empleadas en el blog sean muy estrechas (lo cual también hace que el texto alineado a la izquierda quede horrible por las enooormes irregularidades que se crean a la derecha, qué os pensáis…).
Mientras tanto, invito (y reto) a todo el que afilaba su cuchillo al inicio del post a que se pase por este blog y me diga sinceramente si queda mal el justificado que empleamos. ¿No verdad? La culpa la tiene Hyphenator, un plugin de WordPress que se encarga de insertar guiones al final de los renglones que lo requieren para partir palabras y hacer la labor de justificado que no realizan los navegadores. Está basado en Hyphenator.js, un JavaScript que implementa el algoritmo que utiliza LaTeX para estas labores. Por supuesto, se ejecuta del lado del cliente y realiza la tarea de forma transparente tanto para el cliente (se ejecuta en cuanto se carga la página, si el navegador soporta JavaScript) como para el blogger (no hay que añadir nada en nuestros textos). La instalación es sencillísima (la misma que para cualquier otro plugin) y la configuración trivial. Además, soporta un montón de lenguajes —estando el castellano entre ellos—; es decir, que no parte las palabras al tuntún, sino que respeta las normas del lenguaje.
Ahí queda eso.
Joer, estaba buscando como loco una cosa así para mi blog y al final tiré por guionar parte a mano.
Me gusta más la alineación a la izquierda, pero con guiones la cosa se vuelve mucho más bonita.
Aunque la verdad es que las razones que has dado son muy válidas y no te queda nada mal el blog.
El tema nuevo que utilizo yo ahora también tiene el texto justificado. Lo iba a cambiar, pero vi que quedaba bien y no creo que termine metiéndole mano :-)
Me acabo de mirar el manual de LaTeX, y me pone que, por defecto, se intenta que no haya más de 66 caracteres por línea. Eso son unos cuantos menos que los 80 que pones tú, más o menos dos o tres palabras por línea. ¿No deberías hacer las columnas un poco más estrechas para que Hyphenator funcionara óptimamente?
Yo también uso el texto justificado, se me hace más agradable a la vista, y me la pela bastante lo que digan otros, la verdad.
Por cierto, el plugin va de cabeza a mi blog, muchísimas gracias por el aporte.
@Luis: Lo de los 66 carácteres en LaTeX es porque en los libros suelen poner ese número de carácteres por página (yo tengo uno a mano por aquí y tiene unos 70, pero bueno…). De cualquier forma, no responde al mejor o peor funcionamiento del justificado. Hyphenator funciona igual de bien con el número de carácteres que sea.
@Minipimer: Yo también, desde que descubrí cómo escribir esa propiedad en la hoja de estilos de mi blog, la considero casi necesaria. Cambia mucho la apariencia del blog, y a mejor, desde luego.
Y el plugin va directo a mis dos blog. en el blog de clase, van a flipar los alumnos cuando vean eso de las palabras cortadas con guiones.
Gran aporte, Iñaki. Gracias. ;-)
@Luis: Hombre, justificar un texto siempre es más fácil cuanto mayor sea la línea. Sólo por razones de legibilidad, se suele decir que lo óptimo es que cada línea tenga entre 60 y 75 caracteres. 80 tampoco son excesivos, a fin de cuentas todas estas cosas siempre son orientativas. Pero vaya, con 60 caracteres (y partiendo palabras, eso sí), es perfectamente posible evitar los ríos. Esta mañana, iba leyendo el periódico, con 35 caracteres por línea, justificado y, salvo excepciones (que las había), tampoco se notaban demasiados ríos. El problema viene cuando no puedes partir palabras y quieres justificar. No he leído nada al respecto (a fin de cuentas, que yo sepa no existen problemas para partir palabras salvo en la web), pero se supone que no se debería hacer.
A mí, personalmente, me gusta más el texto justificado. Los manuales dicen que ahora es más «in» alinear a la izquierda, más «de diseño», pero creo que la mancha de texto irregular, asimétrica, molesta y afea cuando se percibe como un todo. Por otra parte, lo de que el texto justificado es «autoritario» porque es el que se usa en los libros me parece una memez. ¿Todos los libros del pasado eran autoritarios? ¿Debemos cambiar todas las herramientas que utilizamos y que provienen del pasado, porque podríamos asociarlas a la autoridad? ¿Desterramos también las fuentes con serifas? El problema del tipo de alineación de los textos es puramente perceptivo: tú eliges, simetría o asimetría. Por eso mismo, mientras no sea imposible (columnas demasiado estrechas, títulos etcétera), yo prefiero justificar.
Precisamente en el cartel anunciador de las fiestas de mi pueblo de este año, lo que menos me gustó fue que el texto no estuviese justificado. En serio, me pareció horrible y llegué incluso a pensar que el autor no habría sabido cómo justificarlo.
Pero resulta que no, al autor es dueño de una imprenta, y lleva años justificando todos los textos que le viene en gana, siempre que él lo desee, claro. En este caso, como el chaval es muy «cool», y está puesto en las últimas tendencias, lo diseñó sin justificar. Pero repito que , según mi punto de vista, fue un error garrafal. No me gusta nada.
Enlace al cartel:
http://www.arnedo.es/pdf/ciudad/descarga_folletos29.pdf
Estoy totalmente de acuerdo contigo. Especialmente por dos motivos: el diseñador ha compuesto el texto en mayúsculas, dando lugar a una trama muy ortogonal. Las líneas de texto son tan regulares que parecen rectángulos. Además, la simetría viene reforzada por el texto final que sí está encajado en el ancho total de la hoja. Si haces un cartel tan… cuadriculado, no tiene sentido que alinees a la izquierda, introduciendo una asimetría arbitraria que desencaja con todo lo demás.
Muy interesante y enriquecedor.
Mi duda es si yo necesitaría el Hyphenator, con una columna central de ancho variable. Igual me lo instalo por si las moscas. Viendo el blog con un monitor ancho no habrá problemas, pero para el que lo visite con un monitor más pequeño agradecerá los guiones.
Gracias :)