Es difícil hablar de ópera en un formato como este. Se trata de un género de grandes dimensiones de tipo dramático más que musical y por ello requiere una explicación del argumento resumida y una fragmentación que no permiten llegar a conocer bien la ópera. No obstante, pueden existir arias y otras piezas dentro de una ópera, que funcionen bien incluso de forma independiente. Este es uno de esos casos. Al margen de su significado y su contexto, el Lamento de Dido es una pieza conmovedora, que se puede escuchar una y otra vez aunque no conozcamos bien la ópera a la que pertenece.
Henry Purcell fue un compositor inglés del periodo Barroco. En 1689 compuso Dido y Eneas sobre un libreto de Nahum Tate. Está considerada una obra de gran importancia para la música dramática inglesa. Se divide en tres actos y dura alrededor de una hora. El libreto está basado en la Eneida de Virgilio y narra la historia de amor entre Eneas, héroe troyano y Dido, reina de Cartago. Tras la guerra, Eneas huye para fundar Roma, la nueva Troya, pero, en el camino, sus barcos naufragan en Cartago. Es entonces cuando Eneas y Dido se enamoran. Pero los dioses (siempre dando por culo…), le advierten a Eneas que debe partir en busca de su destino, fundar Roma. Dido, que no puede vivir sin su amor, se deja morir.
El Lamento de Dido es el aria que escenifica la muerte de la reina. Esta temía la partida de Eneas antes de entregarse a él y, pese a ello, quiso arriesgarse por su amor. Por ello, pide que, cuando yazca en la tierra, la recuerden a ella y olviden sus errores, su destino (Remember me, but forget my fate). Podéis leer la letra del aria pinchando en el link a la Wikipedia. La melodía principal va acompañada por un bajo siempre descendente, presentado por los violoncellos en el minuto 1’03 (cuando acaba el recitativo y comienza verdaderamente el aria). Tratad de escuchar este bajo (la melodía más grave) durante todo el aria: Purcell utiliza ostinadamente el mismo movimiento de los cellos hundiéndose en las profundidades, a los que van sumándose los demás instrumentos. El ritmo evoca un avance lento, sin prisas, pausado como el de una marcha fúnebre, pero imparable. Este bajo cobra protagonismo de nuevo al final del aria (4’10), y cuando ésta por fin finaliza y da paso al coro (4’55), vemos cómo la nueva melodía está basada también en fragmentos descendentes que se repiten sucesivamente en tesituras (voces) cada vez más graves. Este recurso (motivos descendentes y lentos, repetidos obsesivametne) es usado habitualmente por los compositores para representar la muerte, su avance imparable. Iñaki ya se refirió a ello al hablar de la Sexta Sinfonía de Tchaikovsky.
La interpretación de hoy corre a cargo de la soprano Maria Ewing y está dirigida por Richard Hickox. Es un aria muy conocida así que encontraréis infinidad de versiones en Youtube, algunas más que recomendables, si bien la mayoría no están escenificadas. ¡Espero que la disfrutéis!
No es por joder el momento cultural, pero decididamente tengo que volver a la medicación, en el título había entendido: de la opera Dildo y Enemas…
@Doctor Mapache: Sí,
¿de Henry Burdel no?
LOL
¡¡Tenéis la mente sucia!!
Aunque debo reconocer que lo del dildo yo también lo había pensado…
El lamento de Dido. No he oído nada más conmovedor. Triste pero conmovedor. es precioso. Es increíble. Y yo sin conocerlo.
[…] por los oyentes de la BBC como la pieza de música más triste jamás escrita, por delante del Lamento de Dido de Purcell y el Adagietto de la 5ª Sinfonía de Mahler. Curiosamente, ambas son piezas de las que ya hemos […]
A mi con lo que se me ponen los pelos de punta es con el final del coro. And never…. never… never part. Lo mejor, los silencios.
sabriais decirme si puedo bajarme gratis de alguna pagina la partitura del lamento de Eneas?
Mira a ver en IMSLP.
Es bellísimo pero tristísimo, sólo se superó por el adagio de Barber. En 2004, la obra maestra de Barber fe elegida como la «obra clásica más triste», por los oyentes del programa BBC’s Today, por delante de «Dido’s Lament» de Dido y Eneas, de Henry Purcell, el «Adagietto» de la 5ª Sinfonía de Gustav Mahler, Metamorfosis de Richard Strauss y Gloomy Sunday cantada por Billie Holiday. (según Wikipedia)
glub… ya lo habíais publicado! No sabía que era o es un trackbacks y no lo pinché hasta hoy. Me encanta oir la versión del lamento de Dido que teneis colgada.
Estoy estudiando hª Arte y tu comentario y audición me ha parecido mágnifico. Este recitativo-aria es sencillamente conmovedor.Además me era muy difícil distinguir la transición entre ambos. Ahora lo he visto perfectamente. !felicidades por haber hecho este trabajo!, fácil de comprender a los que no somos expertos en música.
Mavi