Segunda parte de la entrevista del director del diario EL MUNDO que ya adelantábamos ayer en este post.
En ella comienzan hablando de que, en caso de ganar, el PP no obtendría mayoría absoluta, así que tendría que negociar la investidura. Rajoy no se ve negociando con IU, BNG o ERC, CiU le pone como requerimiento que no toque el estatuto, y el PNV «sería una extraordinaria noticia para España porque significaría que el PNV habría entrado por el camino de la sensatez. Desde luego no sería a cambio de ninguna concesión soberanista, secesionista o de derecho de autodeterminación». Añade que si gana las elecciones será un presidente resolutivo, independiente y previsible. Desde luego, previsibles son todos.
En cuanto a los debates televisivos, opina que serán muy importantes y que se siente capaz de ganarlos. A la pregunta de ¿qué hará cuando Zapatero le diga que con el PSOE hay debates, pero con el PP no los hubo? Responde: «si me lo recuerda delante de todos los españoles, le diré que lo mío fue un error y que en eso él tenía razón». Todavía sigo dándole vueltas a lo de «si me lo recuerda delante de todos los españoles», a mí me da que pensar.
En el resto, hablan del programa electoral del PP. Qué harán en la lucha contra ETA, la lengua, la inmigración, la economía, el cambio climático, la supresión de la Ley de la Memoria Histórica, la supresión de la asignatura Educación para la Ciudadanía, etc. Por supuesto que es previsible.
Si han tenido oportunidad de leer las dos entrevistas (la de Zapatero y ésta), habrán apreciado en la última mayor variedad en las preguntas. Mientras que en ésta se exponen las propuestas del PP de cara a las elecciones, en la de Zapatero apenas se habla de otra cosa que no sea el terrorismo.
Habréis visto también que en este blog las extensiones de ambas son bastante diferentes. Es debido a que, a la hora de hacer el resumen, en la de Zapatero (debido a lo expuesto en el párrafo anterior) me he encontrado con poco contenido relevante de cara a las elecciones. Un suspenso para Pedro J. Ramírez. Otro que es previsible.