Dardos envenenados entre Aguirre y Gallardón

El alcalde de Madrid ha recibido en el Ayuntamiento a la Cofradía del Entierro de la Sardina. En su discurso, ha dejado perlas como éstas:

Sí, amigos: ha triunfado Doña Cuaresma, la del gesto agrio y estricta conducta, y no queda más remedio que plegarse al triste designio que a los alegres y buenhumorados nos depara. Pero no os deis a la melancolía: sabemos que su victoria es pasajera, porque, en el peor de los casos, representa sólo la mitad de la vida, y dentro de un año estaremos celebrando de nuevo, junto a la rediviva sardina, nuevos días de fantasía y esplendor. Madrid volverá a reír, porque ésta es ciudad fértil y risueña, que a diario se sacude la ceniza con su propio nervio y su quehacer incesante. Así pues, y como que hay otra vida, enterremos ya a la sardina, y con ella todas nuestras zozobras y quebrantos, que no hay mal que por bien no venga. Requiescat in pacem.

«Piensa mal y acertarás», dice el refrán. Sutiles dardos envenenados directos a la yugular. También hay otro que dice «a buen entendedor, pocas palabras bastan». Pues eso.

En el PSOE, mientras, deben andar frotándose las manos con las confrontaciones que se están dando en el seno del PP.

(Vía: Escolar.net)

(Discurso íntegro del alcalde, en el diario PÚBLICO.es)