Esclavos en la era digital

Nos lo temíamos. En los últimos meses, los ataques contra las libertades en Internet y contra la neutralidad de la red se vienen sucediendo uno tras otro. El último fue ayer y lo cuentan en Kriptópolis:

Se confirmaron las peores expectativas. Los parlamentarios europeos aprobaron ayer, prácticamente al unísono, las enmiendas a la Directiva Europea de Telecomunicaciones que permitirán convertir a cualquier burócrata en espía y censor.

Así, las autoridades administrativas de cada país podrán decidir qué software es autorizado o prohibido, exigir determinadas implementaciones técnicas en las redes de comunicaciones para permitir el control de sus contenidos, echar de la red a quien comparta contenidos protegidos, etc. En definitiva: los políticos europeos ponen la alfombra roja a los «lobbies» del «copyright» y sitúan a los ciudadanos bajo esa alfombra para que además les pisen las pelotas…

Y si los usuarios somos víctimas, las empresas que requieran proteger secretos industriales o tácticas empresariales habrán de recurrir a técnicas de cifrado con lápiz y papel, libretas de un solo uso y transporte de informes en maletines esposados a las muñecas de sus ejecutivos. Porque a ver quién se fía ahora de que no vayan a espiarse, intervenirse o prohibirse las redes privadas virtuales.

Las tres enmiendas fatídicas propuestas por los conservadores a las que nos referimos –para los que todavía anden despistados– son las siguientes:

  • Enmienda H1, que permitiría a los gobiernos establecer restricciones para evitar el contenido ilícito en Internet, sobre todo actuando sobre la calidad del servicio, lo que permitiría a los proveedores reducir la velocidad de los paquetes de las redes P2P de acuerdo a la ley.
  • Enmienda H2, que busca establecer mecanismos de cooperación entre los proveedores de Internet y los productores de contenido, lo que recuerda poderosamente a cuando en España se pretendía que la SGAE y otras entidades de gestión de derechos de autor pudieran decidir sobre qué contenidos podían estar en Internet y cuales no.
  • Enmienda H3, que obligaría a los proveedores a controlar y advertir por correo electrónico a sus usuarios cuando se descarguen contenido ilícito.

Ayer por la tarde fueron aprobadas (junto con el resto del paquete de medidas) casi de forma unánime. Pero todavía queda una esperanza, puesto que en septiembre tendrá que ser el Pleno del Parlamento Europeo quien refrende estas medidas. Hasta entonces, hay que intentar hacer el máximo ruido posible para intentar que entren en razón.

3 comentarios sobre “Esclavos en la era digital

  1. Bien debuti… ¿y a quién hay que votar en las elecciones al Parlamento Europeo para que esta basura no sea aprobada? A fin de cuentas son los socialistas, en España quienes más le lamen el culo a la SGAE (el PP, desde la oposición, no ha podido regalarles más privilegios de momento)

  2. Ya veremos en qué para todo esto… Como curiosidad, yo mandé el email de rigor, y sólo he recibido respuesta de un diputado de Los Verdes (Hammerstein). Y es que hay formas de ganar votantes más sutiles que los mítines… y no por ello menos eficaces.

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