Chrome: sólo un navegador

No pensaba hablar de Chrome, el nuevo navegador de Google. ¿Por qué razones? Pues porque por ahora sólo es un navegador más en fase de pruebas, con montones de problemas de seguridad, con algunas características «nuevas» que no son tan nuevas, y porque todo el mundo está hablando de él, haciendo sus reviews y publicando sus impresiones; aunque, según he visto, muy pocos han dado en el clavo.

¿Qué me impulsa a hablar de Chrome? El que haya gente que se empeñe en verlo como «algo más», como una revolución, como «un nuevo sistema operativo» (¡?) «competido directo de Windows» (¡¡??). Enrique Dans es un claro ejemplo de ello y es el autor de las afirmaciones anteriores. Esta anotación quiero dedicarla a rebatir esas hipótesis, a explicar por qué son tan absurdas y descabelladas.

Primero hay que advertir de la naturaleza de las opiniones de Enrique Dans, para el que no lo lea con regularidad. Sus artículos suelen ser muy interesantes y sus argumentos no lo son menos. En muchas ocasiones no puedo más que estar de acuerdo con él. Sin embargo, cuando toca el tema de Microsoft, hay que leerlo con cuidado sabiendo que en esos casos no es nada objetivo, pues se deja llevar por el fervor, lo que hace que ataque a la compañía de Redmond cuando hay razones para ello y cuando no. Yo también soy un ferviente seguidor del software libre y le tengo cierta aversión a Microsoft, como él, pero ante todo hay que ser objetivos, y reconocer también cuándo aciertan.

Una vez advertidos, pasaré a explicar mis opiniones sobre el tema que nos ocupa: Google Chrome. Y empezaré por exponer por qué no supone una revolución, al menos la aplicación en sí (ya veremos qué sí supone cierta revolución), luego veremos cuán descabellado resulta afirmar que este navegador es «un nuevo sistema operativo», y para terminar desmentiré que compita con Windows.

Dejando aparte todos los fallos inherentes a todo nuevo programa, Chrome tan sólo es una aplicación más, un navegador orientado a los servicios de Google. Las novedades que trae como navegador, ya hemos visto antes que no son tan nuevas, salvo algún caso puntual que realmente no es tan importante y mucho menos indispensable (como lo de separar las pestañas en distintos procesos). La otra (dudosa o al menos discutible) ventaja que incorpora es que facilita el acceso y el uso a todos los servicios de Google.

Google lleva ya mucho tiempo creciendo sin parar, creando hasta día de hoy montones de las llamadas «aplicaciones web» (que son accedidas mediante la web), a saber: Google Docs, Google Video, Google Calendar, Google Mail, Google Gears, Google Maps… infinidad de ellas (tenéis una lista completa aquí). Así que la verdadera revolución la viene gestando Google desde hace mucho tiempo. Esta revolución consiste en cambiar el paradigma del Escritorio Personal. El Escritorio, así en mayúsculas y tal y como lo conocemos, es una interfaz local con montones de aplicaciones como Office y muchas más que funcionan al margen de Internet. Pues bien, Google se ha propuesto llevar este escenario a la web: dejar de trabajar de manera local para hacerlo de forma remota. Pretende crear un nuevo Escritorio Web. Esto tiene sus ventajas y sus inconvenientes, obviamente, y no pasaremos a discutirlos aquí. En cualquier caso, este concepto se basa en una sola aplicación (el navegador) para acceder a todas las demás en Internet. Así que Chrome no es más que la puerta que nos da acceso al Escritorio de Google, un acceso más específico que el resto de los navegadores, porque ha sido ideado con esa meta. Por ello, Chrome en sí no resulta ninguna revolución.

Por otro lado, tenemos la atrevida afirmación de que Chrome es «un nuevo sistema operativo». A cualquiera que haga sus pinitos en programación y que sepa mínimamente qué es un sistema operativo, le habrá dado una punzada en el costillar inmediatamente al leer esto. Creo que Enrique Dans confunde de cabo a rabo mezcla el concepto de sistema operativo con el de escritorio al realizar esta declaración. Un sistema operativo no es para que lo utilice el usuario jamás. Un sistema operativo es la parte del software que utiliza el propio ordenador. Es una capa muy compleja que reconcilia la capa física (el hardware) con la capa de aplicaciones de usuario. Así pues, decir que Chrome es un sistema operativo es una barbaridad. Chrome necesita un sistema operativo por debajo, como todas las demás aplicaciones, y está diseñado para ejecutarse en un sistema operativo.

Señor Dans, siento quitarle la ilusión, pero Chrome tan sólo es un navegador. Y ya no es que no sea un sistema operativo, es que no le interesa. ¿Sabe la cantidad de trabajo que tiene eso?

Por último, tras ver que Chrome sólo es un navegador, la última afirmación se cae por su propio peso; me refiero a la de que «compite con Windows». Por supuesto que no lo hace. Todo lo contrario: Windows es su aliado. ¿Por qué si no han sacado la primera versión del navegador sólo para Windows? Es evidente: para tener mayor difusión. Windows está posibilitando que la presentación en sociedad del nuevo navegador sea masiva.

Como ya he argumentado, Google es quien pretende cambiar el paradigma de las aplicaciones de escritorio. Lleva mucho tiempo creando todo un universo y ahora ha abierto una puerta: Chrome. Google es quien pretende competir, no con Windows, sino más bien con Office, Outlook, etc. Chrome, con los únicos que puede competir, es con los de su campo, los navegadores: Firefox, IE, etc. Si las aplicaciones web de Google triunfan, naturalmente estos últimos tendrán que adaptarse para dar mejor acceso a ellas. Así que Chrome no es más que uno más dentro de la guerra de los navegadores, y está muy verde todavía.

11 comentarios sobre “Chrome: sólo un navegador

  1. Iñaki, cn todo el respeto: ¿de verdad ves mucha utilidad en escribir una entrada discutiéndome el concepto de «sistema operativo»? Soy profesor de Sistemas de Información, ¿recuerdas? Te aseguro que lo sé, hasta lo explico en clase a gente que hace años que terminó la carrera de Informática o que tienen mucha experiencia laboral en ello… Me dedico a eso, y me pagan por ello. Empecinarse en cuestiones terminológicas no nos lleva a ningún sitio. Lo que digo, como están diciendo ya muchos otros analistas incluyendo a David Pogue en el New York Times, es que Chrome pretende hacer muchas de las funciones que hace un sistema operativo, es decir, convertirse en el entorno en el que corren las aplicaciones, y minimizar así la importancia del sistema operativo como tal. Eso es un ataque en toda regla a Windows y a la informática del siglo pasado, representada por Microsoft. Ya sé que técnicamente no es un sistema operativo. Repito, sé lo que es un sistema operativo. Pero es mucho, muchísimo más que un navegador, y estratégicamente actúa como un sistema operativo, que es a donde yo voy. Al final, la cuestión es: tú dices que Chrome es solo un navegador, y yo digo que no, que va mucho más allá. Y el tiempo, simplemente, te demostrará que tu análisis era simplista y que, por tanto, estabas equivocado.

    Y ahora en serio: ¿de verdad crees que una persona con un prestigio que defender y con una posición respetada en una de las mejores escuelas de negocios del mundo se va a dedicar a actuar como «llevado por el fervor», como si Bill Gates me hubiera robado una novia? ¿No te parece que eso sería más bien poco inteligente? ¿No será que a lo mejor, cuando propongo una postura radical en un sentido, es porque hay análisis que me llevan a pensar que objetivamente es así? ¿No es extraño que además esté muy lejos de ser el único que lo piensa? Dejemos de prejuzgar, dejémonos de «Enrique tiene cosas en contra de Microsoft», y analicemos con un poco de rigor el futuro de la tecnología, que sino no vamos a ningún lado…

  2. Lo que hago es totalmente opuesto a prejuzgar. Precisamente llegué a tu blog hace mucho tiempo desde Microsiervos con prejuicios a favor. Sin embargo, con el tiempo, me has llevado a pensar que te excedes muchas veces con tus ataques a algunos aspectos de Microsoft. Así que reflexiona un momento e intenta averiguar por qué das esa imagen. Porque la das, no te quepa la menor duda, hasta tal punto de cambiar mi antigua predisposición a estar de acuerdo con tus opiniones. Y no sólo conmigo. Ya sabes que cuando tocas temas de estos son muchos los que se te echan encima. Tampoco estoy de acuerdo en la manera en que se meten contigo, que conste. Las cosas es mejor hablarlas con calma, por eso he escrito este post.

    Por otro lado, tú sabes perfectamente qué es un sistema operativo, me parece perfecto. Pero la gente no, y con eso estás contribuyendo a que la gente siga confundida. ¿Si creo que es necesario puntualizar estos términos? Por supuesto. De hecho, tú mismo me das la razón en la necesidad de ser claros cuando dices que incluso lo explicas «en clase a gente que hace años que terminó la carrera de Informática». ¿No te parece gravísimo esto? Pues no sigamos confundiendo a la gente y dejemos a cada cual en su sitio.

    Para terminar, no sólo he escrito la entrada para discutirte el concepto de «sistema operativo». También para quitarle un poco de hierro al asunto de Chrome y dar mi opinión al respecto. Tú lo ves como una plataforma sobre la que corren las aplicaciones. Yo lo veo como una plataforma que da acceso a las aplicaciones que desarrolla Google. ¿Acaso con Firefox no se puede acceder a Gmail o a Google Docs? Claro que sí. La novedad es que Chrome da un mejor acceso a todas ellas. Su meta es la utilización de esas aplicaciones. Es un ataque a la informática del pasado, claro que sí, pero ya no de Chrome, sino de Google en general, y llevamos mucho tiempo viendo cómo se gesta.

    Ahora pongamos otro escenario. Pongamos que las aplicaciones de Google triunfan y todo el mundo las utiliza. Por ello, la gente va pasándose a Chrome para poder utilizarlas mejor. Obviamente, Firefox y demás se adaptarán para prestar la misma calidad de acceso a esas aplicaciones de Google. Entonces, ¿contra quién estará luchando Firefox? ¿Contra Windows? ¿Contra Google? No, contra Chrome. Guerra de navegadores, pase lo que pase, triunfe lo que triunfe. Google Apps y Office están a niveles distintos.

    En cualquier caso, el tiempo lo dirá.

  3. Por cierto, David Pogue no hace el mismo análisis que tú. De ninguna manera. En la cita que pones en tu blog se aprecia perfectamente, porque en ella sólo afirma que Chrome “le quita importancia al sistema operativo” (a no ser que de-emphasize ahora signifique otra cosa), no que se trate de un sistema operativo ni que trate de desbancar a Windows. De ninguna otra parte del artículo se desprende ninguna valoración como éstas concretas tuyas.

    Y como también digo en tu blog, que lo diga David Pogue en el New York Times no te da más razón.

  4. Iñaki, me has ahorrado el trabajo escribir un post prácticamente calcado a éste. En cuanto leí el post de Enrique Dans descargué Google Chrome y me llevé una tremenda decepción al ver que no era más que un navegador más.

    Creo que has argumentado con bastante claridad que la innovación de Google:

    1) … es en el campo del escritorio y no del Sistema Operativo. Aunque Enrique Dans se sienta ofendido porque aclares el concepto, creo que se ha confundido de lleno. Por mí como si da clases en el MIT: en su artículo demuestra no tener clara la diferencia entre Sistema Operativo y escritorio. Tu aclaración me parece muy pertinente.

    2) … no la aporta con Chrome sino con su gama de aplicaciones Web (que, mira tú por dónde, ¡a mí me funcionan perfectamente con Firefox!).

    Pensaba escribir mañana un post al respecto pero como la línea era clavada a la del tuyo creo que mi aportación sobra.

    PD: Aunque normalmente no deje comentarios tengo tu blog en mi lector RSS y lo sigo a diario. ¡Enhorabuena! ¡un blog del 10!

  5. Hola Iñaki. Pues aunque tengas razón y no sea lo mismo Escritorio que Sistema Operativo, entiendo lo que quiere decir Enrique Dans, aunque no se haya explicado bien.
    Creo que el otro día él habló de lo de Dell y la ejecución en Linux de un navegador y un lector de correo antes de arrancar el S.O (Windows), ha mezclado los conceptos y… ¡Bum!
    Yo también creo como tú que la revolución se lleva gestando ya mucho tiempo, pero esto es como una jugada maestra: «Mirad, hemos estado haciendo esto en vuestra cara, es el futuro y lo más importante, y en vez de dirigiros hacia allí, ahora lo hago yo delante vuestra sacando Chrome».
    En realidad. dará igual el sistema operativo, el ordenador será la nube, y desde el movil, el pc o la nevera podremos ver las mismas cosas.
    Lo que la gente ve es lo que usa; imagínate, si todo el mundo usara las aplicaciones de Google, Docs, maps, Picasa, Etc, acabarían diciendo «yo uso Chrome, de Windows no entiendo como va».
    Pero me ha gustado mucho tu post.
    Un saludo.

  6. Saliendome un poco de la tensión de los dos primeros comentarios, yo voy un pasito en otra dirección.

    Hacia donde se dirige internet hoy en dia? Hacia donde Google quiera, así de simple. Es el buscador más usado a años luz de los demás (por no decir que el 70% (a ojo) de los internautas no conocera otro), pero cada día es más y más grande. Youtube es suyo, nos tiene a todos en sus fotos por satelite, etc etc…

    Y he aquí lo grave. A diferencia de los comienzos de la red, hoy en día todo pasa por Google, todo está centralizado, ELLOS tienen el control. No estamos corriendo de que se convierta en el Gran Hermano que anunciaba George Orwell en 1984???

  7. Yo creo que lo que hace Chrome es crear una shell alternativa al escritorio de Windows. Pero Google ya ha anunciado que sacará versiones de Chrome basadas en Linux y Mac OS. De ahí a sacar una distribución de «Google-Linux» hay un paso. O una versión de Android para PC.

    El invento no es nada nuevo, y no hace más que confirmar la ley del péndulo: Al principio aparecieron grandes mainframes con terminales a los que conectarse. Al popularizarse la plataforma PC e Internet, se empezó a hablar de ordenadores interconectados, y ahora volvemos al concepto de servidor que nos da acceso a todo con «Thin clients» que no hacen nada más que conectarse al servidor. Google ha hecho esto, pero llevándolo al límite. Quiere que los ordenadores se conviertan en simples terminales que se conecten a sus servidores para trabajar.

    Obviamente, el ataque no es contra Windows (al menos de momento) si no contra Office. Google quiere ofrecer una puerta de entrada a sus aplicaciones de ofimática. Igual que Microsoft utilizó Windows en su día para hacerse con la supremacía de las aplicaciones de ofimática, Google quiere usar Chrome para imponer sus soluciones frente a Office y OpenOffice.

    Ahí está la razón por la que Google alardea de que su proyecto es de código abierto, y que cualquiera puede mejorarlo. Mejorar su producto es ayudar a Google. Que Explorer, Opera, Safari y Firefox se beneficien del código abierto de Chrome no hace más que ayudar a que se implanten las soluciones de ofimática de Google.

    A nivel técnico, decir que Chrome no aporta ninguna novedad respecto a Firefox no es cierto. La arquitectura de Chrome es mucho más sólida que la de los demás navegadores, y en eso reside su fortaleza. Obviamente, no podemos esperar que una aplicación que lleva una semana de vida tenga mejor estabilidad que otras aplicaciones con años en el mercado. Afirmar lo contrario sería como decir que Windows 2000 no aportaba ninguna ventaja sobre Windows 95, basándose en que el escritorio era similar.

    ¿Que es lo malo de Chrome? Parece que Google está tendiendo, no a controlar el mercado como hace Microsoft, si no a controlar nuestras vidas como dice Kelzo. Para empezar, el buscador ya está «embebido» en el navegador, incluyendo la publicidad. Por otra parte, al almacenar nuestros documentos en sus servidores, Google puede tener acceso a dicho contenido, lo cual puede infringir la ley de protección de datos (de hecho la infringe, pues guarda datos personales del usuario puera de España sin avisar al usuario).

  8. (Un poco al margen de todo lo que se está hablando aquí, y aunque en Kriptópolis ya han desautorizado a Chrome por activa y por pasiva, hoy he encontrado esta noticia en DiarioTI; en ella se explica que Chrome puede llegar incluso a funcionar como rootkit).

  9. Pues yo estoy en discordancia con el articulo. Pienso lo mismo que Enrique, es el inicio de una revolucion a un nuevo SO.

    Este navegador es solo un minimo ejemplo de lo que pretende ser computacion en nube (o Cloud Computing). Solo teneis que ver la composicion del equipo de desarrollo de SO’s que tiene Google, del que destaca Rob Pike diseñador de Plan 9.

    Un saludo.

  10. Fantástico análisis Iñaki, lo comparto plenamente. Yo también creo que esto de Chrome es mucho ruido y pocas nueces, como reza el dicho. Como usuario de Firefox no entiendo tanto entusiasmo por un navegador que comenzó con tantas limitaciones y que aparte de su veloz arranque no aporta mucho con relación al resto.

    Con relación a Dans, de quien también escuché muchas cosas y terminé decepcionado al leer su blog, no hace sino confirmar mi impresión sobre su estrategia para crear opinión: exhibir sus pergaminos para evitar reconocer que se ha equivocado; lo segundo es citar a un tercero muy pretigioso, pero generalmente si uno se toma molestia de leer su citas resulta que no le da la razón. Aquí aplica ambas técnicas… con pésimos resultados.

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