(Esta anotación se publica simultáneamente en Aspectos Básicos de la Actividad Investigadora 2013, blog asociado a la asignatura de máster homónima impartida por Joaquín Sevilla Moróder en la Universidad Pública de Navarra)
La documentación científica, más concretamente los papers, debido a la rigidez en su estructura, a la rigurosidad y la seriedad que entrañan, se prestan a la parodia con facilidad. Estos días andan circulando tres excelentes ejemplos, pero seguro que conocéis muchos más (me refiero en todo momento a piezas humorísticas realizadas a tal efecto, porque la ciencia también nos regala a veces estudios que resultan involuntariamente risibles; véase si no, a modo de ejemplo, A closer look on tumbling toast).
Mario Herrero compartía en la lista de Naukas un pseudopaper de un doctorando italiano que al parecer lleva circulando varios años (el artículo, no el doctorando, espero). Lleva por título Foundations of Gauge Theology, y realiza una reinterpretación de las propiedades de Dios bajo el prisma de la Teoría Cuántica de Campos para superar las deficiencias de la Teología Clásica… Lo que viene siendo un físico teórico con falta de horas de sueño, vamos. La primera referencia que aparece, por supuesto, cita a la Biblia. Y por enredar, no con menos guasa (y razón), César Tomé aprovechó para darnos una pequeña lección:
No es por enredar (o sí) pero la primera frase es falsa.
Ni toda teología ha considerado a dios/dioses omnipotente/s y omnipresente/s, ni siquiera la teología judía prerabínica lo ha hecho. Por otra parte la cita [1] es incompleta, pues Biblia es un nombre genérico: hay que especificar versión no sólo de los textos originales (por ejemplo Septuaginta / Vetus latina / Vulgata y dentro de éstas si es la versión alejandrina o la vaticana) sino también a qué compilación de libros bíblicos canónicos nos referimos (no es la misma la ortodoxa, que la católica que la protestante) y en el caso de que sea una traducción a una lengua moderna cuál es esta: en el caso del español, por ejemplo, de la biblia de Jerusalén (la que usa el Vaticano y editada en Bilbao) a la del Nuevo Mundo va un abismo. y esto es suponiendo que nos estamos refieriendo a una biblia cristiana y no a la Tanaj judía, claro.
Demasiados problemas con la frase de inicio como para seguir leyendo.
No le queda a la zaga esta genial propuesta de matrimonio en forma de paper: Two Body Interactions: A Longitudinal Study. A este respecto, Iván Rivera apuntaba apropiadamente que «Quién hubiera dicho que en esa fase de la interacción de dos cuerpos el \LaTeX{} pudiera ser tan útil como el látex».
Por último, de la mano de Fernando Frías llego a Towards a Quantum Mechanical Interpretation of Homeopathy (está claro que la mecánica cuántica vale para todo…), uno de los múltiples ejemplos que podemos encontrar en Improbable Research, una organización que «recopila (y a veces conduce) investigaciones improbables»: «investigaciones que hacen reír y después pensar». Y además publican una revista llamada Annals of Improbable Research. Y además son los administradores de los premios Ig Nobel.