Los obispos españoles, esos que tacharon la campaña del bus ateo de «agresiva» y «ofensiva», ahora, en cambio, se creen en su perfecto derecho de insultar la inteligencia de los ciudadanos con una campaña en vallas publicitarias desde hoy hasta fin de marzo en 37 ciudades españolas en contra de la reforma de la ley del aborto. Este es el vergonzoso cartelito de marras:
¿Soy yo, o están llamando genocida al gobierno?
Tranquilo que no eres tú, sí que están llamando genocida a todos los que defienden/defendemos el aborto.
Me hace mucha gracia que utilicen las fotografías de la evolución del cigoto hasta convertirse en el bebé. Tan científicos para unas cosas y tan poco para otras…
No seas bruto y falaz (como lo son los obispos). No están llamando genocida al gobierno; le están llamando simplemente asesino (pues el gobierno no se plantea la destrucción de una etnia o un grupo humano particular). Como mucho, «asesino en masa». O «asesino en serie»:
http://abordodelottoneurath.blogspot.com/2008/12/lo-confieso-yo-soy-un-asesino-en-serie.html
Hombre, la comparación es absurda. Precisamente existe una suprepoblación de esos animalillos sin pelo. Por el bien del ecosistema, más convendría cazarlos que prohibir abortarlos, pero vamos… ellos mismos.
En efecto, el símil sólo tendría sentido en una situación en que estuviéramos a punto de existirnos y haría falta un auténtico genocidio para llegar a esa situación. Pero no es el caso: sencillamente, el cartel no tiene sentido y punto. La comparación es demagógica y carece de fundamento.
Este cartel me gusta mucho más…
http://malditasmentiras.blogspot.com/2009/03/nino-protegido.html
Pues si, el cartel que indicas, Mapoto, también tiene lo lo suyo…
Respecto al cartel de marras, otra acción a la desesperada que lleva a cabo el clero, no para tratar de ganar más adeptos, sino para tratar de que a los que no somos de los suyos, nos den bien de palos en el culo.
Como comenta Iñaki en la entrada, me parece vergonzoso que ellos se indignen por cuestiones como el bus ateo, y luego saquen a la calle campañas o declaraciones mucho mas fuertes, radicales y tajantes que las que a veces se realizan defendiendo otras posturas que no son las de la iglesia. Por otra parte, esta posición es en parte entendible, ya que los pobrecitos están demasiado acostumbrados a que nadie les rechiste, ya sea por verdadera y ciega fe, o por miedo a caer en las garras de la inquisición eclesiástica.
Afortunadamente, estamos en una época de la historia en la que los librepensadores podemos expresar nuestras ideas sin que nos quemen en la hoguera. Auqnue en «pago» por nuestra sinceridad recibimos a cambio la recriminación de gran parte de la sociedad que, ya sea por costumbrismo o por vagancia neuronal, asocia cualquier elemento contrario o diferente a la iglesia al mal y al demonio. Se nos señala con el dedo como los malos de la película sin pararse a pensar o razonar la postura que criticamos. Si lo ha dicho la iglesia seguro que es cierto y está bien, así que aplaudimos como las foquitas amaestradas en el circo, y punto. La una lo hará por comida, y los otros por un puesto en el cielo, al lado de Caperucita, el lobo, y todos los personajes de Alicia en el País de las Maravillas.
Así como llenan 37 ciudades españolas con carteles recordándonos a los pecaminosos y endemoniados ateos que -según ellos- está mal abortar, podíamos llenar nosotros 37 iglesias, con carteles que recuerden a los sacerdotes que la pederastia (por referirnos a un tema de triste actualidad)está prohibida y penada por las leyes terrenales, aunque parece que no tanto por las divinas.
¿O no vemos la paja más que en el ojo ajeno?
No me convence del todo el cartel, pero sí que tiene su sentido.
La ley protege a animales como el lince, esto ya lo sabemos, y sin embargo no protege la vida del que no ha nacido. Al contrario, el gobierno pretende con esta ley, ampliar los plazos y añadir supuestos para que sea legal que una mujer termine con la vida del hijo que lleva dentro.
La ley da libertad a la mujer de elegir (bonita manera tiene el gobierno de usar el lenguaje y no mostrar la verdad…), sí, pero de elegir si quiere o no terminar con la vida de un ser humano; así de claro y también así de duro.
No se proponen soluciones eficaces que ayuden a la mujer a seguir con su embarazo, alternativas a favor de la vida que se está gestando, y se obvia decir los serios problemas que conlleva el aborto para ella.
Por supuesto, NO a la nueva ley del aborto y SÍ a la vida, al compromiso, a la educación en valores, y sí a decir las cosas alto y claro: el aborto es un asesinato.
@Name: ¿»No se proponen soluciones eficaces que ayuden a la mujer a seguir con su embarazo»? ¿Cómo que no? Es tan sencillo como no abortar. ¿O es que el gobierno obliga a todas a abortar a partir de ahora? No me jodas, hombre…
Tú obvias decir los problemas muy serios que conllevaría no abortar, por ejemplo y así a bote pronto, a una mujer violada.
Y no, no se termina con la vida de un ser humano. Lo has dicho en tu comentario: se termina con «la vida que se está gestando«, luego NO gestada. ¿No ves que te contradices en tres líneas? Eso es no tener las cosas claras.
Lo que se proponen son ayuda y facilidades para abortar. Se plantea el aborto como una solución rápida a una situación que resulta complicada para la mujer. Así que no me vengas con «es tan sencillo como no abortar», porque las cosas no son tan sencillas, y sin ayuda, sin asesoramiento y sin rumbo, lo difícil es decir no al aborto.
No me he referido a ningún caso en particular, precisamente para no entrar en el caso de la violación que es el único supuesto en el que, como mujer y madre, entiendo lo difícil que puede ser llevar adelante un embarazo así. De todos modos, hay personas que en esa situación han sido capaces de continuar con el embarazo. Ejemplos de que es posible, pueden servir de ayuda a otras en su misma situación y también se tiene que conocer.
Y sí, sí se termina con la vida de un ser humano, un ser humano no nacido. De hecho cuando nacemos, estamos preparados para vivir separados de la madre, pero no se ha completado nuestro desarrollo. El hecho de que que el feto se esté gestando no le resta individualidad y ser. Para mí, lo es desde el momento de la concepción, tampoco hace falta que venga la ciencia a decírmelo…
Y no creo que me contradiga, será que opinamos distinto, ¿te molesta?
Yo creo que si eres tu, porque no veo la palabra genocida en ningún sitio y pienso que tienen todo el derecho de el mundo a decir lo que piensan del aborto.
Yo no estoy en contra de el aborto, pienso que si alguien no desea hijo no debe llegar a tenerlo. Pero también pienso que cuando se unen los gametos y estos están unidos al utero, la interrupción de este proceso no debería llamarse de otra forma que no fuera asesinato, puesto que lo es, solo que en la mayoría de la ocasiones perfectamente justificado.
Los padres deben de tener total control y posibilidad de decisión sobre su descendencia, pero no deberíamos olvidar que un feto es una persona, aunque nunca haya visto la luz.
Gracias.
@Name
«Educar en valores»
¿En qué valores?, ¿en los de la Iglesia?, no gracias.
@Hel: de lo que he dicho, ¿me sales con eso? Pues anda que no es amplio el término…
¿Te das cuenta de que no he mencionado a la Iglesia en ningún sitio?, ¿es posible que pienses que mi opinión es la que tengo por propia convicción, por ideas propias y no impuestas?
¡Que manía tenéis algun@s de llevar cualquier asunto a lo de siempre!
…
La idea de que el ser humano es tal desde el momento de su concepción sí tiene un origen religioso, mal que te pese Name. Quizás tú la hayas hecho tuya por otros motivos y con argumentos que a mí me gustaría escuchar.
Este argumento religioso viene de la idea de que dios es quien nos insufla la vida, y como tal, esa vida es sagrada. ¿Cuándo empieza esa vida intocable? Pues desde que aparece «milagrosamente»: la concepción. Esto implica que un montón de células embrionarias también tiene «alma», pues su origen es misterioso, sagrado. ¿Qué opinas tú de la investigación con células madre? ¿La destrucción de un embrión es asesinato sólo en el caso del aborto? ¿O también en los casos de inseminación artificial o clonación terapéutica?
Está claro que hay que poner un límite, cuándo empieza «el ser humano», cuándo comienzan sus derechos. Si la vida es un don divino, estos empiezan con la misma unión de un óvulo y un espermatozoide. Pero si la vida es lo que es, un montón de moléculas que por algún motivo extraño se resisten a la entropía, entonces a lo mejor no es tan grave que me extirpe unas cuantas de esas para poder seguir con mi vida. Que esas moléculas tengan un ADN distinto al mío, no me parece especialmente relevante, «eso» no es un ser humano.
¿Dónde pongo yo el límite?: 1- En el momento en que la extirpación de esas moléculas (ahora mismo no sé bien qué nombres recibe el feto en cada estado de gestación, pero vaya, la extirpación de ese trozo de carne que crece en el útero) supone un riesgo para la salud de la madre, 2- o bien cuando ese ser puede respirar sin el soporte vital que supone el vientre materno (matar a ese niño, ahora sí, supondría un asesinato, una acción deliberada y voluntaria de acabar con lo que ya es una vida autónoma). Hasta ese momento, el cuerpo de la mujer es suyo y lo usa de UCI si le sale a ella de las narices.
Lo que sí resulta falaz son ciertos comentarios.
No «se proponen ayudas y facilidades para abortar». Se pretende despenalizar el aborto, que ahora mismo es un delito. No se ayuda a abortar, se quitan las dificultades antes impuestas.
No «se plantea el aborto como una solución rápida a una situación que resulta complicada para la mujer».
Un aborto nunca es una solución rápida y aséptica, no se anima a las mujeres a tomarla. Sólo se permite que sean ellas quienes tomen esa decisión. Las otras posibles soluciones: dar el hijo en adopción, buscar ayuda o lo que sea, seguirán existiendo para que quien no quiera abortar no tenga que hacerlo. Quien quiera acudir a consejeros que la «asesoren» sobre cómo llevar una maternidad que desea llevar adelante pese a los problemas, podrá seguir haciéndolo. Los grupos pro-vida o centros de planificación familiar seguirán estando ahí para quien quiera acudir a ellos. Pero quien no crea que ese embrión deba seguir adelante, no tendrá por qué sobrellevar su embarazo de forma obligatoria.
[…] Almudena en: Nueva campaña de los obispos contra el aborto […]
Hoy he oído en la radio que el lince que aparece en la campaña no es un lince ibérico, si no un lince euroasiático, no se que vamos a salvar en España si de esté ultimo no hay ningún ejemplar en nuestro territorio…