Mejor no digo nada y veis directamente los vídeos. En el primero, el resultado; en el segundo, la explicación de cómo funciona el tinglado.
(Vía: Popular Science)
Artículos no técnicos sobre tecnología: comunicaciones, seguridad, Internet, software, etc.
Mejor no digo nada y veis directamente los vídeos. En el primero, el resultado; en el segundo, la explicación de cómo funciona el tinglado.
(Vía: Popular Science)
Una bonita manera de refrigerar nuestro ordenador: sumergiéndolo completamente en aceite mineral. ¡Con burbujitas y todo!
Es tan fácil como hacer una especie de «acuario» de metacrilato del tamaño de la placa base, meter las tripas del PC dentro y llenarlo de aceite mineral. Existe un vídeo del proceso. Importante: sacar los puertos USB fuera. ;-)
Una manera original de potenciar el efecto de un insecticida o de aprovechar ese frasco de laca viejo. Un manillar de bicicleta, un mechero y…
Ningún bicho estará a salvo, ¡muahahahahaha! ¡Qué gran invento! Lo siguiente ya es utilizar napalm…
(Visto en No puedo creer…)
(xkcd, como siempre, genial)
Visualicemos un vehículo de dos ruedas por eje (véase un coche) trazando un círculo completo. En realidad se estarán trazando dos círculos: uno de radio menor, recorrido por las ruedas «interiores» a la curva, y otro de radio mayor, recorrido por las ruedas «exteriores» a la curva. Esto significa que, en toda curva y en todo eje, la rueda interior recorre menos distancia que la rueda exterior. Así que, si el eje es rígido, típicamente la rueda interior patinará, puesto que el peso del vehículo se desplazará hacia la rueda exterior, obligando a que todo el eje gire a la velocidad de esta, con la subsiguiente desestabilización del vehículo.
Para solucionar este problema, se inventó el ingenioso mecanismo diferencial que, mediante engranajes, reparte el par de giro entre las dos ruedas permitiéndoles en todo momento girar a velocidades distintas. Y qué mejor manera de entenderlo que con imágenes. A continuación, un vídeo de los años 30 con una magnífica explicación del funcionamiento del diferencial (visto en haha.nu).
Los más avispados se darán cuenta de que este mecanismo, si bien soluciona lo anterior, conlleva otro problema no menos importante: la pérdida de tracción. Numerosas circunstancias (gravilla, hielo, o incluso una rueda que se levante en el aire) pueden hacer que una de las ruedas del eje pierda adherencia, con lo que el diferencial actuará proporcionando todo el par a esta rueda que girará descontrolada mientras la otra permanece inmóvil.
Los diferenciales autoblocantes están destinados a impedir esta pérdida de tracción. Diferentes implementaciones, como el diferencial Torsen o el Ferguson, consiguen que las ruedas giren a distintas velocidades hasta cierto punto, a partir del cual el par de giro se concentra sobre la rueda de mayor tracción, mitigando así el defecto del mecanismo diferencial. Este tipo de diferenciales son caros y se utilizan fundamentalmente en vehículos de altas prestaciones y de competición. En el resto, han sido sustituidos por los sistemas de control electrónico de tracción.